Ingredientes para el smoothie de café y avena

1 taza de 125 ml de café

1 taza de 125 ml de leche

1 plátano

1 dátil

1 cucharada sopera de copos de avena

 

3 opciones irresistibles de smoothies ideales para veganos - VIX

 

Lo primero que tendremos que hacer es preparar el café de la manera que lo preparamos habitualmente. El café es la bebida con mayor cantidad de sustancias antioxidantes que podemos incluir en la dieta. El consumo moderado de café reporta numerosos beneficios y es adecuado dentro de una dieta saludable. Entre los beneficios de café podemos destacar:

Mejora la capacidad de alerta

Disminuye el cansancio

Mejora la utilización de la glucosa en las células

Posee cierto efecto termogénico y lipolítico

Al café que hemos preparado le vamos a añadir una cucharada sopera de copos de avena. La avena es una buena fuente de proteínas, de ácidos grasos insaturados y de fibra. La fibra de la avena regula el azúcar en sangre y también ayuda a disminuir el colesterol sanguíneo. Además, posee un efecto saciante muy importante.

Y ¿cómo hacemos para endulzar si no le añadimos azúcar? Es muy fácil, vamos a utilizar endulzantes naturales, es decir, vamos a aprovechar el sabor dulce de otros alimentos para endulzar. Añadiendo un plátano matamos dos pájaros de un tiro, endulzamos y a la vez estamos añadiendo una de las raciones de fruta diarias recomendadas por médicos y nutricionistas. Como puede ser que no sea suficiente el sabor dulce del plátano para contrarrestar el amargo del café, vamos a añadir también un dátil, al que le tendremos que quitar la pepita que tiene en su interior antes de introducirlo en el vaso de la batidora.

Una vez que tenemos los ingredientes preparados vamos a introducirlos en el vaso de la batidora y los trituramos hasta obtener una mezcla homogénea y cremosa.

Como ves este desayuno es muy completo y no se tarda más de 5 minutos en prepararlo y poco más en tomarlo ya que es líquido y nos lo vamos a beber. Pero, si como yo, dispones de poco tiempo por la mañana, puedes dejarlo preparado la noche anterior. Una vez batido deberás guardarlo bien tapado en el frigorífico y por la mañana sólo tienes que sacarlo y tomarlo.

Si no te gusta desayunar frío, aunque en esta época de verano resulta muy apetecible un desayuno fresquito, no hay ningún problema si quieres calentarlo un poquito, ya que estará igual de rico.

¿te animas con la propuesta de smoothie de café y avena?

Fuente: https://www.lecuine.com/blog/smoothie-de-cafe/