El perejil es una hierba conocida desde hace muchos años, tanto como hierba medicinal como especia para ser utilizada en la preparación de una gran variedad de platos.

¿Sabías que? Estas humildes ramas que hasta hace poco se regalaban en las verdulerías constituyen una de las fuentes más abundantes de vitamina C, calcio, hierro y vitamina A que existen.

El perejil es, por supuesto, un alimento recomendable para todas las personas. Basta tomar 50 g de perejil fresco para cubrir las necesidades diarias de vitamina C, el 60% de vitamina A y el 31% de calcio. Destaca por sus propiedades diuréticas, digestivas y como protector de los vasos sanguíneos.

Para obtener de forma más directa sus beneficios, lo mejor es comerlo en crudo y utilizar todas sus partes: raíces, tallos y hojas. Así no solo se disfrutará más de su sabor, sino que se podrán aprovechar sus bondades para calmar dolencias digestivas y combatir el mal aliento.

Algunos de las potencialidades medicinales del perejil son:

  • Prevención de anemia
  • Prevención y tratamiento de infecciones en la vejiga
  • Tratamiento del mal aliento
  • Purificador y tónico de la sangre
  • Diurético natural
  • Estimulante inmunológico
  • Protección de los riñones y disminución de los síntomas de la artritis

Cultivo

La reproducción del perejil se lleva a cabo por semillas, en áreas con abundante sol, y con un suelo que no sea extremadamente compacto. Es ideal para sembrase en jardineras o macetas, pudiendo disponer de forma más fácil de hojas tiernas y frescas para saborizar las recetas.

Las semillas del perejil deben ser sembradas alrededor de 1/8 a ¼ de pulgada de profundidad. Una vez que los brotes hayan alcanzado entre dos y tres pulgadas de alto, deben separarse un poco (preferiblemente entre 10 y 12 pulgadas de distancia cada una), para que cuenten con un espacio suficiente para florecer con normalidad.

 

 

Con información de:

https://www.flores.ninja/perejil/

https://www.cuerpomente.com/guia-alimentos/perejil